Las relaciones diplomáticas entre África y México
África tiene un peso cada vez mayor en la esfera multilateral. Su devenir político, sumado a su dinámica económica y comercial, aviva la atención de otras regiones del planeta; por ejemplo la Unión Europea y los principales países asiáticos: Japón, Corea del Sur y China. Si México pretende llevar a buen puerto su estrategia de diversificación comercial, debe ampliar los horizontes de su estrategia diplomática y explorar mercados alternativos; los africanos, entre ellos. El senador Salomón Jara Cruz, activo promotor de un mayor acercamiento con África desde el ámbito legislativo, habla aquí de las nuevas y viejas relaciones diplomáticas entre nuestro país y ese continente.
Por: Bancomext

¿Qué relevancia tiene África en la estrategia mexicana de diversificación de mercados?

Al menos en las últimas cuatro décadas, los vínculos y la estrategia diplomática y de intercambio comercial de México con el continente africano están marcados por la inconsistencia. Un rasgo que se hizo más notorio a partir del gobierno de López Portillo, cuando decidió cerrar la embajada en Tanzania, recién abierta. Los períodos que más afectaron la relación con África fueron los de Salinas de Gortari y Zedillo. Hubo un evidente desapego: la administración salinista cerró las embajadas en Zimbabue y Senegal, el presidente no asistió a la cumbre del G-15 en Senegal, y el recibimiento de Nelson Mandela cuando visitó México en julio de 1991 fue tibio.

Hoy, África vive una etapa de gran dinamismo sociopolítico y económico. Los intereses y la influencia de las potencias que históricamente han operado en el continente están cambiando. Al mismo tiempo, hay una nueva presencia oriental, encabezada por el triángulo de China, Japón y Corea del Sur, que aprovecha los vacíos dejados por potencias europeas.[1]De hecho, el papel que actualmente desempeña China en África es considerado, por múltiples analistas, como neocolonialista. Los gobiernos africanos buscan relacionarse con los principales centros financieros del mundo para atraer mayores flujos de capital e inversión. En esta dinámica se abren importantes oportunidades comerciales para México, que puede ampliar su presencia en el continente mediante una estrategia de cooperación.

¿Por qué los empresarios mexicanos deberían volver la vista a África?

Porque es un mercado atrayente. Está integrado por 55 estados,[2]con una población de más de mil 200 millones de habitantes y un crecimiento promedio de 6% del PIB anual. África es el segundo continente más poblado después de Asia y el tercero con mayor territorio.[3]Además, tiene vastos recursos naturales. Algunos de sus países pueden tener ventajas políticas, militares y comerciales gracias a su ubicación. Son lugares geopolíticamente privilegiados. Muchas naciones africanas, por cierto, reconocen las ventajas económicas y tecnológicas de México, a pesar del escaso intercambio en este rubro.[4]

La inversión extranjera directa (IED) recibida por África se ha multiplicado varias veces desde el año 2000. Las regiones africanas más beneficiadas son la occidental y la del sur. Hay nuevos mecanismos para fomentar las inversiones, y muchos países impulsaron estrategias y acciones para desarrollar la infraestructura, la industria, las telecomunicaciones, el turismo y otros servicios. Países como Egipto y Nigeria han reformado su sistema bancario y fiscal, han creado zonas especiales para la IED de exportación y han establecido incentivos fiscales y financieros a la inversión.

 

“La inversión extranjera directa (IED) recibida por África se ha multiplicado varias veces desde el año 2000.”

 

¿Qué países del continente africano le sugeriría visitar al nuevo presidente?

Considero que es importante dar prioridad a los países más dinámicos, como una oportunidad para diversificar y ampliar la presencia mexicana en África. Según las proyecciones del Banco Mundial, destacan Ghana, Yibuti, Etiopía y Costa de Marfil, con tasas de crecimiento que van del 7 al 8 por ciento. Son países que usan el gasto público para desarrollarse más. Las economías de Etiopía, Costa de Marfil y Yibuti se están beneficiando de importantes inversiones en infraestructura.

Es necesario mantener o retomar los lazos diplomáticos con Senegal, Tanzania y Zimbabue, países en los que México cerró sus embajadas y a los que ha restado prioridad. También, abrir nuestra embajada en Angola; debimos haberlo hecho desde hace más de 15 años, por el principio de reciprocidad diplomática. Lo mismo en Costa de Marfil.

Las relaciones bilaterales de México con los países africanos aún no son tan sólidas como para ameritar una gira del presidente. Sin embargo, sí podríamos intensificar nuestra participación en algunos foros multilaterales, como las cumbres de la Unión Africana (UA), en las que México es observador. Tal vez sería buena idea que el presidente acudiera a la próxima cumbre de la UA, a fines de enero. Ahí, podría estrechar las relaciones diplomáticas y económicas de México con África.

¿Qué obstáculos enfrenta el fortalecimiento de los vínculos comerciales y de cooperación con África?

La violencia que se ha vivido en muchos países del continente es un factor relevante; corresponde a los gobiernos africanos combatirla. Sin duda, las condiciones políticas de diversos estados africanos están cambiando. Por ejemplo, tras el derrocamiento de regímenes que se habían perpetuado, como los de Robert Mugabe en Zimbabue, Blaise Compaoré en Burkina Faso, José Eduardo dos Santos en Angola y Yahya Jammeh en Gambia, llegan nuevos gobiernos que pueden dar mayor estabilidad a sus países y a la región. Sin embargo, otras naciones han sufrido golpes de Estado y levantamientos armados, sin contar la persistencia de gobiernos longevos como los de la República Democrática del Congo, Uganda, Guinea Ecuatorial y la República del Congo.

También está el problema de la corrupción. Pudimos verlo en los fraudes de Sierra Leona y Guinea, donde desaparecieron seis millones de euros de la ayuda para combatir el ébola, y en los escándalos de Nigeria y Marruecos. Transparencia Internacional reporta una mejoría en las últimas dos décadas, con avances significativos en gobernabilidad y rendición de cuentas.[5]Evidentemente, queda mucho por hacer.

Finalmente, deben considerarse los problemas de índole social, como la marginación, la pobreza extrema, las altas tasas de analfabetismo y los rezagos en salud.

Por medio de la cooperación internacional para el desarrollo, México puede ayudar ahí donde tiene experiencia. En materia de salud y transparencia, tenemos muchas cosas que ofrecerles.

Desde el punto de vista diplomático tenemos que la representación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en México impulsa una enorme labor cultural y de difusión del conflicto que sostienen con Marruecos en el seno de de Naciones Unidas con el objetivo de lograr su independencia.

Es de destacarse el tema de la descolonización del Sáhara Occidental, ya que nuestro país siempre lo ha apoyado incondicionalmente en Naciones Unidas, con base en el principio de autodeterminación de los pueblos consagrado en nuestra Constitución Política, así como en todo el derecho internacional que ha sido impulsado por dicha organización en la materia. En múltiples ocasiones, nuestro país ha tenido un papel muy destacado cuando se trata de velar por el acatamiento de estos importantes temas.

¿Qué países son los más atractivos para la expansión de las exportaciones e inversiones mexicanas?

Guinea Ecuatorial puede ser una opción viable de diversificación. Fue una colonia española. Compartimos el idioma y ciertos lazos históricos y culturales, que facilitarían la negociación. Tiene una población cercana al millón de habitantes en una superficie de 28 mil 51 kilómetros cuadrados. Su PIB es de 10 mil 179 millones de dólares. Ha crecido mucho (30% de los noventa a la fecha) gracias a la explotación de petróleo y gas. Para diversificarse, quiere atraer inversión en cinco rubros: agricultura y ganadería; pesca; minería y petroquímica; turismo, y servicios financieros. El comercio entre México y Guinea Ecuatorial en 2015 fue de 500 mil dólares. Cuentan con un memorándum de entendimiento en materia de avicultura, un acuerdo marco de cooperación y el reglamento interno de una comisión mixta de cooperación.[6]

El año pasado se iniciaron negociaciones con Ghana, otro país atractivo. En las reuniones de un grupo de empresarios mexicanos con autoridades de ese país, el ministro de Comercio e Industria africano se interesó en el intercambio comercial.[7]Es importante cuidar este avance. Una ventaja adicional es que México ya cuenta con una representación diplomática en Accra.

También están Angola, Sudáfrica y Nigeria, socios estratégicos de México en el África subsahariana. Según proyecciones del Banco Mundial, en 2019 crecerán 2.2, 1.8 y 2.2 por ciento, respectivamente. En el norte del continente está Egipto, que es el primer socio y aliado de México en la región. Crecerá 5.5% este año.[8]

¿Y en cuanto a los sectores de la economía y los productos?

Las oportunidades de inversión en África están creciendo en tres sectores estratégicos: infraestructura, turismo y energía. En infraestructura, el continente empieza a tener un fuerte desarrollo con la modernización de puertos, la construcción de carreteras y presas, y el tren entre Etiopía y Yibuti, entre otros proyectos. En turismo, 2018 mostró tendencias positivas, principalmente en el norte y el sur del continente, así como en las costas orientales de Kenia y Mozambique.

Se han hecho estudios en México que indican que los países con mayor potencial de negocios para nuestra economía son Túnez, Argelia, Costa de Marfil, Ghana, Nigeria, Botsuana y Sudáfrica. Es importante tomarlos en cuenta.

¿Ha tenido México una estrategia para ampliar su presencia en África?

Desde el punto de vista diplomático me parece que en el pasado no hubo una estrategia específica para África. Por ello, hoy es difícil estrechar relaciones de este tipo con muchos de sus países. De ahí la importancia de que el gobierno actual realice un ejercicio diplomático serio y responsable. En lo comercial y económico, se ha avanzado considerablemente con la entrada al continente de empresas mexicanas como Bimbo, Cemex, Gruma, SuKarne, Kidzania, Omnilife, Carso, Cinépolis, Rotoplas y Cosmocel. También, hay productores agrícolas mexicanos que exportan cada vez más a África. Sin embargo, hace falta mantener estos avances y mejorar las estrategias, tanto para promover a África entre los empresarios mexicanos como para dar a conocer a México y sus bienes en dicha región.

En su opinión, ¿qué debería de hacer el gobierno mexicano para consolidar la relación?

Fortalecer las alianzas y las relaciones bilaterales de México con las principales economías emergentes del continente; además de aprovechar los lazos que ya se han establecido con algunas de ellas. Podría retomarse la idea de utilizar a África como una plataforma de exportación a Europa, aprovechando las condiciones climáticas y geográficas del norte de África. Esto ayudaría a reducir los costos de las exportaciones de perecederos desde México.

¿Cuáles son las actividades diplomáticas más importantes de México en África y viceversa?

En el norte de África, las misiones diplomáticas mexicanas tienen una amplia cobertura. Ahí están tres de las ocho embajadas en el continente: Marruecos, Argelia y Egipto, que fue el primer socio político de México en África y con el que se han estrechado lazos.

Con las misiones comerciales y el fortalecimiento de nuestros vínculos con los países del norte de África tras la entrada de Bimbo y Cemex a Marruecos, y de Cemex a Egipto, se ha favorecido enormemente el intercambio comercial y económico.

La misión de Sudáfrica también es muy importante. Se trata de una potencia regional con gran estabilidad económica y política. Además, este país se ha distinguido por su labor a favor de la paz en otros rincones de África, así como por su relevancia económica y su lugar entre los BRICS. Las misiones de Argelia, Marruecos, Egipto y Sudáfrica también suponen una actividad diplomática importante porque de estos países provienen los principales inversionistas africanos en México.

¿Qué cambios institucionales hacen falta para que África y México consoliden su relación diplomática y comercial?

Me parece que lo más importante es que la nueva política exterior contenga, respecto a África, objetivos específicos, claros y realistas. El trato a los países africanos debe fundarse en la máxima premisa de la igualdad jurídica de los Estados. Al menos desde el gobierno de Miguel de la Madrid, se ha visto y tratado a África como una región inferior, por lo que la relación diplomática adquirió rasgos más complejos.

En segundo lugar, pueden hacerse acuerdos comerciales y de inversión con aquellos países donde la relación bilateral es más sólida. Habría que dar prioridad a la materia económica y buscar la negociación de un tratado de libre comercio.

Por otro lado, con la reapertura de sus embajadas y la instalación de representaciones diplomáticas en Angola y Costa de Marfil, México enviaría un mensaje muy claro del interés por incrementar su presencia en el continente.

De manera paralela, la representación africana acreditada en nuestro país podría complementarse con la que se tiene de manera concurrente en Washington D.C. Con este propósito, se pondría en marcha un programa de estrechamiento diplomático, en cuyo marco se convocaría a reuniones de trabajo conjuntas para establecer un vínculo directo y temático específico en cada caso. Pienso esto porque sólo nueve países africanos cuentan con embajadas residentes en nuestro país, mientras que desde Washington se atienden ocho concurrencias y una más lo hace desde La Habana.

¿Cree usted que el número de embajadas mexicanas en África es suficiente?

Como dije, sólo hay ocho embajadas de México en el continente africano. Es importante atender el principio de reciprocidad con Angola y Costa de Marfil, y reabrir las embajadas mexicanas cerradas por gobiernos anteriores.

Desde hace algunas décadas, México se ha valido de la modalidad de embajadas concurrentes en África para cubrir, desde el punto de vista diplomático, las zonas aledañas a los países donde está la sede principal de la misión. En la práctica, sin embargo, es complicado atender bien la relación bilateral con las naciones donde están las concurrencias, por falta de información sobre el acontecer diario del estado receptor y porque, a veces, no es sencillo viajar entre ciudades y países.

La presencia mexicana en África occidental también es escasa. Es una región con muchos gobiernos democráticos, políticamente estables, grandes mercados potenciales, crecimiento económico y vastos recursos energéticos, particularmente en el Golfo de Guinea. Ahí, nuestro país solo tiene embajadas en Ghana y Nigeria.

La zona del este de África es la más desatendida. Debemos pensar en reabrir la embajada en Tanzania. Este país tiene 54 millones de habitantes, estabilidad política y un mercado en rápido crecimiento. Es la puerta de entrada al comercio con el continente asiático. Desde ahí podría cubrirse, por lo pronto, Uganda, otro país dinámico con 40 millones de habitantes.[9]

¿Cómo evolucionará la presencia de México en los mercados africanos?

Favorablemente. Sin duda, la actividad en África de empresas mexicanas destacadas a nivel mundial es un buen presagio para los inversionistas y para las firmas mexicanas más jóvenes. En el marco de la diversificación de las relaciones diplomáticas de México, me parece que deben impulsarse y consolidar los esfuerzos que permitan que se logren los objetivos.

 

 

[1]Alfredo Pérez Bravo, “México y África”, Revista Mexicana de Política Exterior, núm. 42, 1994. https://revistadigital.sre.gob.mx/images/stories/numeros/n42/perezb.pdf

[2]México reconoció a la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) como estado desde el 8 de septiembre de 1979.

[3]Varios Autores, “Diplomacia mexicana en África”, Milenio, 28 de febrero de 2017, en: http://www.milenio.com/opinion/varios-autores/derechos-humanos/diplomacia-mexicana-en-africa 

[4]Alfredo Pérez Bravo, op. cit.

[5]Mauricio de Maria y Campos, Una política exterior actica de México hacia África. Asignatura pendiente en el nuevo escenario mundial, Tepoztlán, Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi, AC, 2018, en http://www.foroconsultivo.org.mx/proyectos_estrategicos/img/8/29.pdf

[6]Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques, Información General de Guinea Ecuatorial. Ficha técnica, Senado de la República, 2018, en https://centrogilbertobosques.senado.gob.mx/ docs/F_Guinea_Ecuatorial.pdf

[7]É Logística, “Impulsan Comercio México y África” Revista Énfasis, 2017, en http://www.logisticamx.enfasis.com/notas/79186-impulsan-comercio-mexico-y-africa-

[8]Comunicado de Prensa, “La economía mundial se expandirá un 3.1% en 2018; se prevé un crecimiento menor en el futuro, Banco Mundial, 2018, en https://www.bancomundial.org/es/news/press- release/2018/06/05/global-economy-to-expand-by-3-1-percent-in-2018-slower-growth-seen-ahead

[9]Mauricio de Maria y Campos, op. cit.